¿Sabías que? El menudo es un platillo icónico de la gastronomía mexicana que tiene sus raíces en las tradiciones culinarias del país, especialmente en el norte. Este platillo se prepara con callos de res, que son cocidos a fuego lento hasta que alcanzan una textura suave y tierna. El caldo en el que se cocinan es de color rojo vibrante, gracias a la mezcla de chiles secos, como el guajillo y el ancho, que le dan un sabor profundo y ligeramente picante. Además, se añaden especias como orégano, comino y ajo, que realzan aún más su sabor.
El menudo es conocido no solo por su sabor, sino también por su valor cultural y social. En muchas regiones de México, es común disfrutar de un buen tazón de menudo los fines de semana, especialmente después de celebraciones o reuniones nocturnas, ya que popularmente se cree que es un remedio efectivo para la resaca. De hecho, el menudo es considerado por muchos como un “platillo para el alma”, ya que se sirve caliente y se acompaña con tortillas, cebolla picada, orégano, chile piquín y jugo de limón, convirtiéndose en una experiencia gastronómica completa.

Este platillo ha sido transmitido de generación en generación, y aunque cada región tiene su propia variante, la esencia del menudo sigue siendo la misma: una sopa rica, robusta y llena de sabor, que no solo alimenta el cuerpo, sino también el espíritu. Hoy en día, el menudo es un símbolo de la cocina mexicana tradicional, amado por su autenticidad y su capacidad de reunir a familias y amigos alrededor de la mesa.
