🥬 ¿Cómo evitar que la lechuga se marchite tan rápido?
Guardar la lechuga correctamente puede hacer la diferencia entre una ensalada crujiente y una lechuga triste y aguada. Muchas personas la guardan tal cual llega del supermercado, pero la clave está en la sequedad y el aire controlado.
🔬 ¿Por qué se marchita?
La lechuga es muy sensible a la humedad y al oxígeno en exceso. Cuando se guarda mojada o sin protección, las hojas se deterioran rápidamente. La humedad crea un ambiente ideal para el crecimiento de bacterias que dañan las hojas.
✅ Paso a paso para conservarla mejor:
- Lava la lechuga con agua fría para eliminar tierra y residuos.
- Sécala muy bien: usa toallas de papel o una centrifugadora de ensaladas. Las hojas deben estar completamente secas.
- Guárdala en un recipiente hermético o una bolsa con cierre.
- Coloca una servilleta de papel dentro del envase para absorber cualquier exceso de humedad.
- Refrigera en el cajón de vegetales.
👉 Si repites este proceso cada vez que uses la lechuga, te puede durar hasta una semana fresca y crujiente.

🧠 Consejo extra:
Si ya está un poco floja, ponla en agua con hielo durante 10 minutos antes de usar. ¡Recuperará su firmeza!
🌟 Beneficios de hacerlo así:
- Ahorro económico al no desperdiciar lechuga.
- Mejora la presentación de tus platillos.
- Siempre tendrás una ensalada fresca lista.
