Los hotcakes, también conocidos como panqueques o pancakes, son un desayuno clásico en muchas partes del mundo. Sin embargo, lo que pocos saben es que este platillo tiene una historia antiquísima: los registros más antiguos indican que se consumen desde hace más de 5,000 años.
🌍 Los primeros hotcakes de la historia
En excavaciones arqueológicas en Europa se encontraron restos en el estómago de Otzi, el Hombre de Hielo, un cadáver momificado de hace más de 5,000 años. Entre su última comida se hallaron restos de granos que habían sido cocidos de una manera muy similar a lo que hoy llamamos hotcakes.
Estos primeros “panqueques” no llevaban leche ni azúcar. Eran simplemente granos triturados mezclados con agua y cocinados sobre piedras calientes. Aunque muy rústicos, cumplían la función de ser nutritivos, fáciles de transportar y rápidos de preparar.
🥞 Evolución a través del tiempo
Con el paso de los siglos, diferentes culturas desarrollaron sus propias versiones:
- En Egipto se elaboraban panes planos a base de trigo.
- Los romanos los hacían con leche, huevos y especias, y solían endulzarlos con miel.
- En la Edad Media europea, las recetas se diversificaron, y con la llegada del azúcar a Europa, los hotcakes se volvieron más dulces.
El hotcake moderno, tal como lo conocemos en América, llegó con la influencia europea y se adaptó a los ingredientes locales, convirtiéndose en un desayuno tradicional.
📊 Curiosidades
- En Estados Unidos, se consumen más de 700 millones de hotcakes cada año.
- El récord del hotcake más grande del mundo fue de 15 metros de diámetro, preparado en Inglaterra en 1994.
- En muchos países hay días especiales dedicados a los panqueques, como el famoso “Pancake Day” en el Reino Unido.
💡 Más que un desayuno
Los hotcakes representan la evolución de la alimentación humana: desde lo más básico, como granos y piedras calientes, hasta preparaciones sofisticadas con siropes, frutas y cremas. Son un reflejo de cómo algo tan sencillo puede transformarse en un símbolo cultural y en un placer universal.
La próxima vez que disfrutes de unos hotcakes esponjosos con miel, piensa en esto: estás saboreando un alimento con más de cinco mil años de tradición.
